domingo, febrero 20, 2005

Nunca más

"¡Qué vergüenza!" Eso fue lo primero que pensé cuando me di cuenta que mi blog había tenido visitas mientras estaba de vacaciones. Sentí como si alguien hubiera llegado a mi casa un sábado a las 9 de la mañana y encontrara un gran desorden, el refrigerador vacío y a nosotros en pijama, despeinados y con mal aliento. Puede que para muchos sea excesivo, pero como buena cáncer a mi me gusta recibir bien a quienes quiero, que todo esté lindo, que se sientan acogidos y bien atendidos. Así que encontrarme con algunos post e incluso links desde otros sitios (que agradezco profundamente) a mi página, la que para mí era todavía una versión beta que necesitaba cambios y correcciones, fue demasiado para mí. En serio.

Pero también me di cuenta de cómo funciona todo esto (aunque me resista) : hay que tirarse de una vez a la piscina, no existen borradores ni ensayos, no sirve escribir algo pensando que después se puede borrar o editar, no hay que hacer trampa. ¿Suena conocido? Parece que no se aplica sólo para los blog.